Desde que tengo uso de razón, Roma, es una de las ciudades que tenía ganas de visitar, y este año, se ha dado la oportunidad de visitarla.
Sabía que iba a ser cansado, pero que merecería la pena, y no defraudó. He vuelto enamorado de esta ciudad, a pesar de haberme perdido alguna de sus maravillas, por estar en obras, por el año del jubileo, que se celbrará el año que viene.










El viaje fue largo, varrias horas de autobus, un vuelo, y cuando llegamos al aeropuerto, nos encontramos con una calor asfixiante, con mucha humedad.
Llegamos a mediodia a Roma, y despues de comer, dimos un paseo, por la roma barroca, y cada una de sus plazuelas y calles. Es una ciudad, que merecede ser recorrida a pie, y buena cuenta de ello dieron los 15 kms diarios que recorimos. Pero os aseguro que merece la pena todo ese esfuerzo.
A pesar de ser de Mèrida, y estar acostumbrado a encontrarte algún monumento cada vez que doblas una esquina, lo de esta ciudad, son palabras mayores. No sabes lo que te vas a encontrar en cada calle, cada esquina, y cada vez te encuentras algo mejor y más espectaular y maravilloso.










Uno de los días,tuvimos la oportunidad de ir a Asís, ciudad en la que nació San Francisco de Asís, uno de los patrones de Italia,cuya historia, nos conmovió a muchos de los que alli estabamos.
Un pueblecito en la montaña, en la mitad de Italia, a 180 kms de Roma, pero digno de ver.













Hacía mucho que no tiempo que no me volvía loco buscando rincones, y detalles, sin necesidad de contar una historia amorosa o familiar. Simplemente, disfrutando de la fotografía, del turismo, y del placer de guardar todos esos recuerdos.
Roma es una ciudad llena de historia, que te deja fascinado para toda la vida.
A continuación os dejo algunas de las fotografías que realicé.









































